Lo mejor: Sin dudas lo más destacado fue el debut de Rodrigo Castillo, que tuvo una correcta presentación formal en la primera división de Acassuso, anulando en todo el primer tiempo a Damián Anriquez. Los diez minutos finales donde el equipo con más ganas y empuje que fútbol fue en busca del empate. Auzmendi con pocos minutos generó tal vez la única chance de peligro que tuvo el Quemero y mostró algo distinto al flojo partido que hicieron Vidal y Schinnea.
Las dudas: Por momentos dio la sensación que el equipo jugó el partido como uno más y se acordó tarde de buscar el triunfo. Como no suele suceder se marcó muy mal la pelota parada y tras una cadena de errores Fénix logró el único tanto del partido. Ni Schinnea, ni Alderete le cambiaron la cara al equipo y siguen sin aprovechar las chances para meterse en el equipo titular. Poco de Pipino y Salvatierra, los laterales casi no pasaron al ataque y eso se sintió, encima el doble cinco tuvo que dedicarse más a meter que a jugar. Claro está que Acassuso no se sintió cómodo en un pésimo terreno de juego en el que Fénix fue más inteligente y se llevó el premio mayor.
Balance: Negativo. El equipo jugó mal y perdió. Como se suele decir ni antes eran los mejores ni ahora son los peores. Acassuso tiene con que para salir adelante y el domingo tendrá la oportunidad de cambiar la imagen que quedó de un muy flojo partido. Quedan 5 finales (Sacachispas, Almirante, CADU, JJ Urquiza y los 45´ restantes con All Boys) para tratar de terminar entre los 5 primeros y meterse en la próxima Copa Argentina, el primer objetivo que se puso el plantel para esta temporada.
Foto: Acassuso Prensa.
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