Lo mejor: Se ganó un clásico. Se estiró la ventaja sobre ellos y ya quedó en el olvido por este año el tema descenso. Se escaló al cuarto puesto de la tabla de posiciones. Se afianza en zona de reducido. En lo futbolístico se ganó con autoridad. Volvió a marcar el Canario Brito que vino como todo delantero para hacer goles. Por fin y luego de muchos partidos volvió a marcar un gol Capasso, el tanito lo busca en cada pelota parada y siempre esta cerca, hoy tuvo su premio. Los del medio manejaron muy bien la pelota y dejaron en claro cual de los dos equipos era el protagonista principal y cual el de reparto. Bozzoni esta vez sumó en ataque y evitó con un magnífico cierre el descuento de la visita.
Las dudas: Sosa luchó pero jugó muy poco, y se perdió un gol increíble en un mano a mano con Bangardino. Pipino jugó muy bien hasta el penal que le contuvo el muy buen atajador que tiene VSC, luego pareció acusar recibo y bajó su rendimiento, en el complemento tuvo su revancha ante una pelota cruzada y otra vez ganó el uno visitante. Quizá en la primera etapa el Quemero debió haber creado alguna situación más de gol en proporción a la diferencia que hubo en el juego.
Balance: Positivo. A pesar de haber terminado el primer tiempo empatado en cero la sensación que había en el estadio era que los tres punto iban para San Isidro. Acassuso impuso condiciones desde el principio al fin, a pesar que la Villa tuvo un par de situaciones claras en un momento para empatar (Vera estrelló una pelota en el poste) y en otro para descontar (Bozzoni y su cruce ya mencionado). El equipo está cada vez más sólido y con un poquito más de creatividad y/o eficacia en la zona de definición da la sensación que no hay rival de la categoría que lo pueda superar. Hoy se alcanzaron los cuarenta puntos del torneo anterior y aún falta mucho para seguir sumando. Hoy se tiene cinco puntos más que en la primera mitad de la primera rueda. Quedan de los más variados rivales, el torneo es muy irregular, con este andar sólido del equipo parece que un lugar en el reducido estaría asegurado. Hoy un loco en la platea me contó que soñó que los punteros se caían y que Ssuso no paraba de ganar....le pregunté como había terminado ese sueño y me dijo que justo sonó el despertador. Cada uno tiene derecho a poner el epílogo que quiera a ese sueño que nos pertenece a todos.
Por Marcelo Adrián Colla
Foto: Acassuso Prensa.
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