lunes, 1 de mayo de 2017

BIEN EN DEFENSA, MAL EN ATAQUE


Acassuso no pasó del 0-0 ante la UAI Urquiza y sigue sin poder ganar en lo que va del 2017. El Quemero cumplió en el trabajó defensivo pero sigue en deuda en la labor ofensiva. 

El equipo de Blas Giunta presentó dos lineas de cuatro bien definidas y se lo vió mucho más preocupado por la marca que por la generación ofensiva. La defensa otra vez fue lo mejor de Acassuso con un gran trabajo de Manuel Capasso, quien para Abran la Cancha fue la figura del partido. Enfrente estaba un UAI Urquiza que venía de hacerle dos goles a Atlanta y tres a Comunicaciones y que poblaba el mediocampo de jugadores de buen trato de pelota como Suarez, Montenegro, Viegas y Mbombaj, y arriba dos interesantes delanteros como Diaz y Zapata, pero el Quemero los controló muy bien y casi que nunca pasó sobresaltos en defensa.
En la delantera muy poco de Acassuso, por no decir nada, con el creador de fútbol Esteban Pipino muy lejos del área y más ocupado en tapar las subidas de Ferreira que en generar situaciones para los delanteros Salvatierra y Gonzalez, ambos de floja tarea.
El primer tiempo se fue al descanso casi sin situaciones en las áreas, a penas un cabezazo de Enzo Díaz bien controlado por Julio Salvá y no mucho más, del lado del local la producción ofensiva fue tan mala que no pateó al arco en todo el primer tiempo.
En la segunda etapa iba a haber una jugada que podría haber cambiado el tramite del partido, cuando a los 16 minutos el arbitro Gastón Meineri no expulsó a Mbombaj tras un pisotón sobre Pipino a pocos metros del juez, y Saporiti rápidamente sacó de la cancha al mismo Mbombaj, dejando expuesto al arbitro que claramente se había equivocado.
La reacción de Acassuso llegó demasiado tarde, Giunta probó primero con Corradino por Salvatierra y luego con Romero por Gonzalez, pero no dieron resultado, recién con el tercer cambio surgió efecto y la entrada de Pusnar por Ham le aportó velocidad y frescura al ataque a un Quemero que recién en los últimos cinco minutos tuvo en una contra de Pipino que demoró en darsela a Pusnar y en una aparición de Giménez que apareció por atrás de todos pero no pudo definir.
Fue un empate que dejó la sensación de que la defensa volvió a ser la del 2016, mientras que en ataque Giunta deberá trabajar y mucho con un equipo anemico de goles.

Por Leandro Dezi. 

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